Tenía el poder de hipnotizar
los hacía dormir
y así repetir
la misión fatal.
Buscaba infieles al azar
que por retozar
vuelvan a su hogar
con la orden de confesar
Una palabra
llevarían grabada
que al ser pronunciada
no podrían vencer
La euforia en trance
por contarlo todo
ni bien suene sólo
el término “mujer”
Tenía el poder de hacer el mal
y solo advertí
su escote gentil
inclinado a mí
Su telaraña, una boutique
y ella de perfil
glúteo saltarín
me mira y ya estoy allí.
Por el cumpleaños
de mi esposa, y ella
en su sostén, estrella
toda mi intención.
Voy por su cuerpo
y no compro el regalo.
ni llamo intentando
alguna explicación.
Miré un vestido y vino a mí,
y en el probador
sufro el primer shock
olas de calor
Y llega el daño y no hay noción
lo estrecho y de pie
gime en un hotel
luces de oropel, pasión.
Libero el morbo
de cuanto orificio,
muerdo, giro, dicto,
lamiéndonos bien.
Despierto solo
ebrio y baboseado
me apuro y me trabo
y el cierre también
Y ya es de día y vuelvo a vos,
tu silencio, tos
mis ojeras yo,
raro el pantalón.
Oigo en tus dedos percusión
dónde ayer, con quién
ya suena “mujer”
vuelvo al sueño y la misión
Digo, unos senos mientras
tu cumpleaños
también en el baño
y un pie en el bidet
Muestro hasta el ticket del
alojamiento,
donde relamiendo
estuve hasta recién
Y de un vestido que elegí
se lo probó por ti
e hizo para mí
todo un striptease
Y me increpás te oigo gritar.
sigo en el sopor
no tengo valor
que me lleve a resistir
Lo que más duele de este mal
conjuro
es que acabé cornudo
y sin hipnosis fue
Con el dentista
y escuché una lista
que con mi analista
trato de entender.
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